La Selección Mexicana mostró una clara mejoría en el funcionamiento colectivo, pero volvió a fallar en lo más importante: marcar goles. Ante una selección de Costa Rica que fue superada en intensidad y propuesta, el Tri no pudo reflejar su dominio en el marcador y se conformó con un empate 0-0 en el Allegiant Stadium de Las Vegas, un resultado que si bien le otorgó el liderato del Grupo A, dejó mucho que desear en cuanto a contundencia y carácter.
Desde el arranque, el técnico Javier Aguirre dejó atrás los experimentos y presentó una alineación más lógica, apostando por Raúl Jiménez como único eje de ataque y dejando las bandas a Alexis Vega y Roberto “Piojo” Alvarado. La apuesta funcionó en dinámica ofensiva: México fue más peligroso, más vertical y por momentos arrinconó a los ticos. Pero una vez más, la falta de eficacia y el exceso de confianza frente al arco rival sepultaron las posibilidades de una victoria clara.
Durante la primera mitad, México generó al menos cuatro oportunidades claras de gol antes del minuto 30. Sin embargo, la figura de Keylor Navas emergió como un muro infranqueable, sumando atajadas que recordaron sus mejores noches en Europa. El Tri no supo capitalizar sus momentos y eso, en un torneo de esta índole, puede pagarse caro.
El segundo tiempo se tornó más trabado, con una Costa Rica que apostó al contragolpe y por poco da el campanazo con un zapatazo de Alonso Martínez que estremeció el travesaño de Malagón. México, por su parte, perdió claridad y terminó firmando un empate que, aunque le evita cruzarse con Estados Unidos en Cuartos, no puede considerarse satisfactorio.
Para colmo, cuando parecía que Santiago Giménez le daba el triunfo al Tri con una joya de media tijera, el VAR apareció para anularlo por un supuesto fuera de lugar, una decisión polémica y cuestionable, pero que no debe servir como excusa. México no ganó porque no supo definir, no porque el VAR lo impidiera.
El rival: Arabia Saudita y una baja sensible
Ahora, el equipo nacional se medirá ante Arabia Saudita en Cuartos de Final, con una semana de preparación. Sin embargo, César Montes no estará disponible por acumulación de tarjetas, una baja importante para una defensa que no ha sido exigida a fondo en el torneo.
Un paso más… ¿pero hacia dónde?
El resultado deja una sensación agridulce: se avanzó de ronda, pero no se avanzó en credibilidad. México sigue sin reflejar en goles su dominio, y sin una contundencia clara, el camino hacia el título se antoja cuesta arriba. No basta con jugar bien por lapsos, hay que ganar, y ganar bien.
El Vasco y sus jugadores deben asumir que los partidos no se ganan con buenas intenciones, y que en esta Copa Oro no habrá margen para otro día sin gol.