El sueño por fin se hizo realidad en la frontera. FC Juárez está en la Liguilla del futbol mexicano por primera vez en su historia, luego de derrotar 2-1 a Pachuca en un partido dramático, intenso y cargado de nervio, propio de un Play-in que volvió a cumplir su “maldición”: el peor clasificado nunca avanza.
Y esta vez, los Bravos no solo lo evitaron… lo derribaron con autoridad.
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Bravos pega primero… y pega fuerte
El Estadio Olímpico Benito Juárez vibró desde el minuto 15, cuando Madson De Souza se elevó en el área para clavar un espectacular remate de tijera tras un servicio desde la izquierda. Golazo. Sacudida. Estallido en la tribuna.
El impulso continuó al 38’, cuando José Luis “Puma” Rodríguez prendió de volea un balón rechazado y lo mandó a guardar con potencia quirúrgica. Bravos ya ganaba 2-0 y tocaba con la punta de los dedos su primer boleto a la Fiesta Grande.
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Pachuca responde en el momento más inesperado
Cuando el primer tiempo agonizaba, Jhonder Cádiz sorprendió a Jurado con un disparo cruzado que redujo la diferencia al 45+1’. Un golpe de nervio que encendió la incertidumbre rumbo al complemento.
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La expulsión que selló el destino
Pachuca salió al segundo tiempo con todo, pero la presión les pasó factura. Un descontrolado Brian García vio la roja al 68’ tras soltar una agresión sobre Estupiñán. Con un hombre más y la tribuna empujando, Bravos cerró filas y controló el reloj.
Los Tuzos, desesperados, nunca encontraron claridad. Bravos manejó el partido, enfrió la reacción y consiguió lo que parecía imposible hace apenas unos torneos: meterse a la Liguilla por la puerta grande.
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Próximo reto: Toluca, campeón y favorito
La recompensa no es menor… ni el desafío.
En los Cuartos de Final, Bravos enfrentará a Toluca, vigente campeón, líder desde la Jornada 1 y gran favorito para levantar de nuevo el título. Pero si algo quedó claro hoy, es que este FC Juárez no le teme a la historia, sino que está decidido a escribir la suya.